La adenda al convenio vigente de Prestación Farmacéutica suscrita entre ambas entidades contribuirá a mejorar la sostenibilidad del sistema sanitario e incluirá una campaña informativa en las farmacias andaluzas
El Servicio Andaluz de Salud (SAS) y el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CACOF) han firmado una adenda –que consiste en una modificación del actual convenio por el que se fijan las condiciones para la ejecución de la prestación farmacéutica a través de las oficinas de farmacia de Andalucía– para conseguir, por un lado, la promoción de la dispensación de medicamentos genéricos en las oficinas de farmacia cuando se prescriba por principio activo y, por otro, la colaboración y contribución de las oficinas de farmacia a la sostenibilidad de la prestación farmacéutica en Andalucía, mediante una aportación económica sobre el consumo de este tipo de medicamento.
Este acuerdo, valorado por ambas partes como “necesario” para ahondar en la seguridad de los pacientes, incluye medidas para promocionar los medicamentos genéricos, como el diseño y distribución de cartelería informativa dirigida a las personas usuarias sobre las ventajas de estos medicamentos -al poder identificar fácilmente el medicamento, evitando confusiones y posibles duplicidades terapéuticas-, que se expondrán en las oficinas de farmacia y en otros formatos digitales, y la formación a profesionales de las oficinas de farmacia sobre de estos medicamentos y la importancia de la sensibilización de los pacientes para la aceptación de la dispensación de genéricos.
Andalucía es pionera y líder a nivel nacional en prescripción por principio activo. Gracias a esta forma de receta, se contribuye al conocimiento de los medicamentos por los pacientes y a una utilización más segura. Esto evita, por ejemplo, la sobredosificación provocada por la toma de un medicamento con el mismo principio activo pero con distinto nombre comercial.
El medicamento genérico es aquel con la misma composición en principios activos (que son los que producen el efecto terapéutico) y la misma forma farmacéutica (comprimidos, sobres, jarabe…) que la marca original y además es bioequivalente con ella.
La prescripción por principio activo y el uso de genéricos permite proveer a profesionales y pacientes de una terminología común, que permita el reconocimiento inequívoco de los medicamentos.