El presidente de la Diputación, que ha participado en un foro sobre esta infraestructura, incide en que es un proyecto urgente y esencial para el crecimiento de la provincia
El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha defendido la necesidad de que toda la sociedad civil se implique en la demanda del tren litoral para aumentar la presión al Gobierno y que se avance en este proyecto para que sea una realidad lo antes posible. Salado ha participado hoy en el foro ‘Los caminos del Tren Litoral. Visiones técnicas, políticas y ciudadanas de las posibles alternativas’, organizado por SUR.
Francisco Salado ha felicitado a SUR por su iniciativa para recabar el apoyo ciudadano al manifiesto ‘Por un tren para la Costa del Sol’ (que en tres días ha recogido unas 15.000 firmas) y ha puesto el acento en la necesidad de llevar a cabo actuaciones de este tipo para no bajar la presión al Gobierno de España.
“Cuando la sociedad civil malagueña ha estado unida -ha añadido-, se han conseguido los objetivos, como en el caso de la creación de la Universidad, la llegada del AVE a Málaga o el logro de que el Palacio de la Aduana se convirtiera en museo”.
El presidente de la Diputación ha puesto el acento en que el tren de la Costa es una obra necesaria y urgente, esencial para el crecimiento de la provincia. “Nadie puede escudarse en que se trata de una confrontación política, sino que es algo de justicia. En cualquier gobierno, sea del color que sea, vamos a seguir defendiendo las necesidades de la provincia, y entre ellas están el tren litoral, la estabilización de las playas o actuaciones en carreteras para evitar el colapso actual”, ha añadido.
Francisco Salado ha recordado que ha habido pronunciamientos de la Diputación de Málaga o del Parlamento Andaluz en defensa del tren litoral, y ha indicado que, aunque el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha movido ficha, asegurando que está dispuesto a reunirse con la Junta de Andalucía y con los ayuntamientos, el problema es que lo ha hecho en campaña electoral.
“Se dice por parte del Ministerio que será una infraestructura muy cara -ha comentado-, pero es una inversión que tiene un retorno social y económico en muy poco tiempo. Por ejemplo, no conviene olvidar que el impacto económico de la industria turística es de 19.000 millones de euros. Y que Málaga es la provincia con mayor proyección de crecimiento demográfico para los próximos años mientras que su red viaria está ya colapsada. No se puede cercenar su crecimiento”.
Salado ha defendido que lo importante es que el Gobierno de España muestre su compromiso y su voluntad política de avanzar en el proyecto para, a partir de ahí, analizar y estudiar las soluciones técnicas más viables. Y, en cuanto a su financiación, ha apuntado que puede reestudiarse el destino de los fondos europeos Next Generation, abordando temas prioritarios como la movilidad y el agua.