El ente provincial ha colaborado con la producción a través de Sabor a Málaga y Turismo Costa del Sol
Manuel Marmolejo ha destacado la importancia y el creciente prestigio del sector vitivinícola malagueño, que cuenta con su propia Denominación de Origen Protegida y con el apoyo de Sabor a Málaga
La Diputación de Málaga, a través de la marca promocional Sabor a Málaga y Turismo Costa del Sol, ha colaborado con la producción del largometraje documental ‘Villa Málaga. El tiempo de un vino’, que se estrenará el 29 de noviembre en el auditorio Edgar Neville.
Así lo ha dado a conocer el vicepresidente de Gestión Económica Administrativa, Manuel Marmolejo, junto a Eterio Ortega Santillana, director y guionista de este documental que también ha contado con la colaboración de la Junta de Andalucía, Canal Sur y la empresa suiza Monograph, que distribuirá el documental en este país. Además, el director ha contado con el asesoramiento del Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen Málaga, Sierras de Málaga y Pasas de Málaga.
Manuel Marmolejo ha destacado la importancia y el creciente prestigio del sector vitivinícola malagueño y de las pasas malagueñas, reconocidas internacionalmente por la FAO como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM). Tanto el vino como las pasas cuentan con el apoyo de Sabor a Málaga, que promociona ambos productos en ferias nacionales e internacionales, convoca cada año los Premios a los Mejores Vinos de la Provincia, ostenta la vicepresidencia primera de la Asociación SIPAM de la uva pasa de la Axarquía y apoya el Centro de Estudios de la Pasa de Moclinejo, el Museo de la Pasa de Almáchar y el Centro de Interpretación de la Pasa de El Borge.
‘Villa Málaga. El tiempo de un vino’
Este largometraje documental de 93 minutos narra la historia que surge tras la compra en una subasta de unas viejas botellas de vino de Málaga, producidas sorprendentemente en una ciudad suiza a principios del siglo pasado. Es Stefan, un médico coleccionista de vinos antiguos y uno de los protagonistas de esta película documental, quien comienza un viaje a través de la historia, del tiempo y del espacio desde la bodega en la pequeña ciudad de Leiztburt, donde se criaron y embotellaron estos vinos, hasta Málaga en busca de su origen. Un viaje de vuelta en el interior de una botella de vino cien años después para descubrir que el corazón de la Axarquía sigue latiendo en los viejos viñedos y paseros de Málaga.
El documental aborda otras historias, como la de una joven alumna de verdiales que acude en bicicleta a tomar clases del maestro, y donde el intercambio generacional y la transmisión de conocimiento se convierten en medios esenciales para seguir cultivando los valores y tradiciones de la región. Otra de las historias es la de un historiador y un electricista y su trabajo de catalogación de los lagares que permite conocer el territorio mientras el tiempo pasa y las estaciones se van reflejando en la vid y los trabajos del campo.
La película, rodada en Suiza y en Málaga, rastrea el pasado de unos vinos que llegaron a ser quizás los más conocidos y prestigiosos del mundo, ya que Málaga era la mayor exportadora de vinos y pasas en los siglos XVIII y XIX, y a través de su puerto distribuía a todos los rincones del planeta botellas de vino y cajas de pasas decoradas con motivos tradicionales de la ciudad y el puerto de Málaga, así como con la figura de la mujer malagueña ataviada con traje tradicional y mantón.
Solo Estados Unidos recibía casi el 50% de la producción, y en Europa eran especialmente apreciados en los lugares más selectos, así como entre los zares rusos. Así, los vinos y pasas de Málaga generaron una importante industria a su alrededor que atrajo a industriales españoles y extranjeros que hicieron grandes fortunas, como los Larios o los Garwey, y todo ello tuvo su reflejo en el urbanismo de Málaga. Pero la filoxera, una enfermedad de la vid que atacó y destruyó casi todos los viñedos de Europa en 1878, también lo hizo con los viñedos malagueños, y aquella pujante industria nunca volvería a recuperarse.
Actualmente quedan 1.200 hectáreas de vid donde se producen 800.000 litros de vino y 200.000 kilos de pasas, pero los vinos malagueños están resurgiendo con fuerza de la mano de bodegueros que preservan el legado patrimonial vitivinícola y al mismo tiempo apuestan por nuevas elaboraciones que están sorprendiendo al mundo del vino.
La proyección dará comienzo a las 19.00 horas, y la asistencia se puede confirmar en el email villamalaga.film@gmail.com.
Eterio Ortega Santillana es un director independiente con más de 30 años de experiencia en el sector audiovisual. Ha realizado cerca de un centenar de documentales para cine y televisión de diferentes temáticas: sociales, artísticas, históricas, políticas… Sus películas documentales han merecido el interés de festivales internacionales como Cannes (Semana de la Crítica), San Sebastián, Göteborg, Manchester, Miami o Valladolid, entre otros, donde ha recibido premios y reconocimiento por sus trabajos. Durante 15 años colaboró estrechamente con el desaparecido y prestigioso productor Elías Querejeta. Es miembro de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España.
Trailer del documental: https://we.tl/t-sOYYQigLRP